no de los mejores regalos que le podemos hacer a la naturaleza es devolverle un poco de lo que anualmente se pierde en deforestaciones e incendios. Según cifras del portal de internet Mongabay dedicado a la conservación medioambiental, al año son talados alrededor de 15 mil millones de árboles. Por esta razón, organizaciones alrededor del mundo llevan a cabo programas en pro de la conservación de la fauna del planeta, con extensas jornadas de siembra para mitigar el impacto en el ecosistema. Si alguna vez has tenido la oportunidad de participar en este tipo de actividades sabrás cuán divertida puede ser esta experiencia, además de gratificante. Sin embargo, si aún no lo has hecho y quieres vivirlo por ti mismo, aquí te contamos en tan solo 5 pasos cómo llevar a cabo la siembra de un árbol de manera muy sencilla ¡Empecemos!
1. Seleccionar tipo de árbol
Lo primero que tenemos que saber es que no todos los arbolitos se adaptan a los mismos climas. Por esta razón, debemos informarnos y ser muy cuidadosos a la hora de elegirlo, pues si vivimos en una ciudad de clima cálido y nuestro árbol es de clima frío, lo más seguro es que no se adapte y por tal motivo no crezca. Del mismo modo, también hay que tener en cuenta el terreno en el que se va a plantar, si es húmedo o seco o si el árbol tiene el espacio suficiente para crecer sin ninguna complicación futura.
2. limpiar el terreno
Lo siguiente que debemos tener en cuenta es realizar una limpieza adecuada del terreno en el cual vamos a sembrar el árbol. Esta actividad se denomina desbrozar el terreno y sirve para despejar las hierbas y la pequeña vegetación que pueda ser competencia para nuestro arbolito e impida su crecimiento.
3. Cavar el hoyo
Después de lo anterior, podemos empezar a cavar donde sembraremos nuestro árbol. Esta etapa es muy importante ya que debemos hacerlo de tal manera que se facilite el arraigo del arbolito. Para esto, debemos cavar un hoyo lo suficientemente profundo y ancho para proporcionarle a la planta la suficiente humedad gracias a la tierra que se ha removido. Además, es preferible que el hoyo tenga unas dimensiones de 40×40 cm y que se cave con semanas o incluso meses de antelación para que la tierra pueda recuperar sus propiedades.
4. Siembra el arbolito
Al momento de realizar la siembra, si nuestro arbolito viene directamente de un vivero, es recomendable sembrarlo junto con el cepellón (la masa de tierra que viene junto a la raíz) ya que esta contiene una pequeña cantidad de nutrientes, del mismo modo podemos mojarla con un poco de agua para optimizar el proceso. Otra cosa que debemos tener en cuenta es que, a la hora de enterrar el arbolito, debemos hacerlo hasta la raíz, además, la tierra que vayamos a utilizar debe estar limpia de piedras u otros elementos extraños.
5. Cuida del árbol
Finalmente, una de las etapas más importantes de la siembra es la de cuidar a nuestro arbolito. Para ello, vamos a regar constantemente con agua y abonar nuestra planta cada cierto tiempo (depende cuál hayamos escogido) a 20 cm de distancia del mismo; se suele cometer el error de regar el abono directamente sobre el árbol, lo cual puede resultar contraproducente para su salud. Además, si queremos evitar que algunos animales se lo coman durante su crecimiento, es recomendable rodear el árbol con una rejilla clavada al suelo.
Leave A Comment
You must be logged in to post a comment.